Instrumentos Rotatorios

Descubre los tipos de conexión, aparatos e instrumental rotatorio odontológico

Actualmente, existen aparatos, como las turbinas o los contrángulos dentales, que son elementos esenciales dentro del equipo que compone el instrumental de una clínica dental. Existen dos tipos de sistemas para propulsar la fresa con la que se realizan los trabajos con este tipo de instrumentos: 

  • Mediante electricidad, a través de un micromotor, con diferentes velocidades (que pueden ser de hasta 200.000 r.p.m.) que hacen de éste un instrumental muy versátil según sea el procedimiento, que sean constantes, sin disminuir la resistencia, con la que se logra un gran rendimiento y flexibilidad en los trabajos, ya que es mucho mayor la precisión. Una de las principales ventajas de los aparatos con este sistema es que el diámetro de la cabeza es un poco más reducido, se logra un mejor ángulo de visión y como resultado, una mejor área de preparación. Además, suelen ser más silenciosos, con una menor sensación de vibración, lo que reduce el estrés del paciente. Este tipo de aparatos en la actualidad están equipados con luz LED, lo que le aporta una ventaja adicional. Entre las desventajas de este sistema están que la cabeza de los instrumentos puede llegar a sobrecalentarse en exceso, y que suelen ser instrumentos más pesados con un riesgo de realizar una presión sobre el diente excesiva (aunque existen casos en los que esto resulta beneficioso para el odontólogo, ya que permite la sujección del aparato de forma mucho más firme y segura).
  • Mediante aire comprimido, a través de un micromotor con el que se alcanza una velocidad de en torno a las 400.000 r.p.m., lo que se traduce en cortes más rápidos y una considerable reducción del tiempo de trabajo, pero que disminuyen de manera considerable el rendimiento del uso de la fresa. Otra ventaja a destacar de este sistema es la mejora en su diseño, ya que son más ligeros, y cuanto más reducido es el tamaño de la cabeza, se logra que su manejo sea más sencillo y se consiga una mejor accesibilidad. Además tienen una menor probabilidad de dañarse, y en caso de que esto ocurra, el coste de las reparaciones es inferior al de los aparatos eléctricos. Por contra, muchos modelos de aparatos emiten un ruido y vibraciones mucho mayores, lo que hace que sean más molestos e incómodos para el paciente.


Turbinas Dentales


Las turbinas dentales son los instrumentos rotatorios que alcanzan una mayor velocidad. Esta puede llegar incluso a superar las 400.000 r.p.m. (aunque cabe destacar que las velocidades de los trabajos suelen ser inferiores, y no superar las 300.000 r.pm.), pero con un torque que, además de estable, resulta de un fácil control. 


Debido a la gran velocidad que alcanzan los rotores de los cabezales en este tipo de instrumental, se genera un elevado calor por fricción, el cuál ha de ser controlado mediante sistemas de refrigeración e irrigación de aire y agua.

Las turbinas suelen emplearse en especial para la realización de cualquier tipo de tratamiento que resulte más riguroso, como la eliminación del tejido más resistente en las piezas dentales, el tallado y las remociones en restauración o las preparaciones de cavidades. Otros usos de las turbinas pueden ser la preparación de coronas, el pulido sobrante de composite o la eliminación de materiales cariados en el diente.

Partes de una turbina:

 

  • El cabezal, es la zona donde va colocada la fresa, con distintos tipos de sujección, (según sea el fabricante). Cuanto más reducida sea la cabeza de la turbina, mejores accesos y visualización se logra, en detrimento de una menor potencia. Dispone de una hélice en su interior (en algunos casos pueden ser hasta dos hélices o propelas, con el fin de lograr más potencia). Con el fin de evitar la posible contaminación del aire que es absorbido por el rotor existen en la actualidad turbinas que incorporan ya una cabeza de tipo higiénico, con conductos que desvían la entrada de ese aire que entra del exterior.
  • Los cuerpos de estos instrumentos, cuyo diseño es angulado, para lograr un acceso más sencillo a la boca del paciente, son zonas de superficies rugosas, lo cuál facilita su sujección. En su parte inferior están situados los dispositivos que se unen a la manguera de los equipos, con el fin de recibir la conexión y retorno de aire (que es capturado por el impulsor -pieza del rotor, que está incluida en la cabeza- para hacer girar la turbina al salir comprimido) y agua. En caso de que ambas partes sean distintas, es necesaria la utilización de un adaptado.

Por este motivo, en el momento de la elección de una turbina, es muy importante tener en cuenta su tipo de conexión, tanto por la compatibilidad con los sillones dentales, como por sus características, de entre las que se pueden distinguir dos principales tipos de conexiones:

De tipo integrado o directo a la manguera del sillón dental, y que, por lo tanto, no necesita de acoplamientos. Sin embargo, exigen que se desconecten por completo para poder realizar su esterilización o ser sustituidas y además, no permiten el giro libre de 360º de la turbina. Su gran ventaja es que la perdida de aire en los adaptadores es inexistente.

Los adaptadores rápidos tienen la ventaja de que las turbinas pueden conectarse y desconectarse al instante, sin tener que desenroscar el instrumento entero de la manguera. Los hay disponibles con y sin luz LED. Casi cualquier marca de turbina dental dispone actualmente de adaptadores rápidos compatibles con sus modelos en el mercado, pero los adaptadores, más extendidos, compatibles con el resto, son los Acoplamientos Multiflex (de Kavo).

Las conexiones de las turbinas a la manguera suelen utilizar principalmente dos sistemas: 

  • Midwest, que dispone de cuatro agujeros o 6 agujeros, si la manguera tiene luz
  • o Borden, con dos agujeros o 3 agujeros, si la manguera tiene luz.

En ambos casos, los agujeros sirven como salidas para el aire y el agua (existen además, adaptadores para los terminales de la manguera del sillón dental que no sean idénticos al que se dispone).


Contraángulos Dentales



 

Son instrumentos rotatorios enfocados a la realización de limpiezas de la superficie en profilaxis, para excavar las caries de gran profundidad o para pulir y finalizar cualquier tipo de restauración. Por este y otros motivos, las velocidades de los contraángulos suelen ser bastante más moderadas que las de las turbinas, pero se controla más el torque (y por lo tanto la fuerza generada).

Su característica angulación hace que resulte mucho más favorable acceder a la boca del paciente. 

Los contrángulos disponen de dos principales partes: la cabeza, donde se coloca y se sujeta la fresa (que suele ser de acero o de carburo de tungsteno, ya que son de una menor abrasividad y corte respecto a las de diamante) y el mango, el cuál incorpora un micromotor, encargado del movimiento.

Según sea la potencia de transmisión del micromotor a la cabeza, los contraángulos se suelen clasificar, para su distinción, con un anillo de color que los identifica:

  • Azul: Son instrumentos de transmisión directa (1:1) en los que la velocidad que generan los micromotores es idéntica a la que recibe la fresa (en torno a las 20.000 r.p.m.). Entre otras utilidades destacan la eliminación de caries, el pulido a velocidad reducida y controlada y la colocación de espigas en la raíz.
  • Rojo: Son instrumentos de tipo multiplicador (1:5) en los que la velocidad que recibe la fresa es superior a la que genera el micromotor (en torno a 20.000 r.p.m. generados que se incrementan unas cinco veces más, sobre las 100.000 r.p.m.). Estos contraángulos suelen utilizarse para tallado de metales (ya que se suelen usar fresas de turbina), para realizar pulidos a una alta velocidad, cualquier trabajo de conformaciones de tipo cavitario,…
  • Verde: Son instrumentos reductores o desmultiplicadores, en los que la velocidad se reduce del micromotor a la fresa:
    • En torno a cinco veces menos (5:1) y suelen pasar de generar unas 20.000 r.p.m. a unas 4.000 r.p.m. de salida, lo que resulta ideal para realizar cualquier tipo de trabajo más preciso en casos de odontologías conservadoras y endodoncias. 
    • En torno a veinte veces menos (20:1) y suelen pasar de generar unas 40.000 r.p.m. a unas 2.000 r.p.m. de salida, lo que supone una gran disminución de calor generado, lo que es idóneo para trabajos muy precisos cómo colocar implantes dentales o determinadas prácticas de tipo quirúrgico.

Piezas de Mano


 

Son instrumentos rotatorios cuyos mangos son rectos, lo que a pesar de limitar su acceso a la boca del paciente, resultan idóneos para cualquier retoque de prótesis dental. Disponen de un eje en su parte interna el cuál transmite a la fresa dental la rotación del micromotor.

Pueden disponer de irrigación externa y luz LED. Partes de una pieza de mano: 

  • la cabeza, donde se colocan las fresas y pueden disponer de un sistema de irrigación externa y luz LED
  • y el cuerpo, de superficies rugosas que facilitan la sujección del aparato y se conectan al equipo mediante una manguera.

La fresa dental que se utiliza en estos instrumentos son de una conexión especial, que no es compatible con las que se utilizan en las turbinas o los contraángulos. Este tipo de fresa suele ser más larga y habitualmente de acero o de carburo de tungsteno.


Micromotor Dental


 

Son sistemas rotatorios de reducida velocidad (no superior a 50.000 r.p.m.) por lo que su utilización está principalmente enfocada a las zonas semiduras de los dientes, como las dentino-pulpares. Se conectan a las mangueras de los equipos dentales y con sistemas de conexión variables. Sobre un micromotor dental se conectan o bien los Contraángulos o las Piezas de mano. Hay dos tipos de micromotor:

  • De tipo eléctrico: Su velocidad puede variar entre 50 y 40.000 r.p.m. y estar realizados en materiales como el titanio, con los que se consigue una reducida generación de calor y pueden disponer de iluminación LED.
  • De tipo neumático: este tipo de micromotores de aire destacan por generar unas elevadas fuerzas de arrastre y porque son sistemas de gran duración. La gran mayoría disponen de un regulador en su parte inferior, con el que poder aumentar o disminuir de modo progresivo la potencia de salida, con simples giros hace la izquierda o la derecha. La conexión a la manguera suele resultar muy sencilla. También pueden disponer de luz LED que permiten la realización de tratamientos con una mejor visibilidad, lo que, junto con su sencilla rotación del instrumento (de hasta 360º en muchos algunos modelos) hace posible que los trabajos se ejecuten con mayor facilidad y menor cansancio del odontólogo. 

Iluminación de los Instrumentos Rotatorios


 

A pesar de que existe instrumental rotatorio que no incorpora luz, lo ideal es que el aparato elegido sí disponga, con el fin de conseguir que la zona quirúrgica esté lo suficientemente iluminada, con la consecuente precisión en los trabajos realizados y una gran reducción del estrés para el paciente y el odontólogo. En la actualidad  una gran parte de estos instrumentos incorporan luz de tipo halógeno, que se transmite hasta la cabeza mediante fibra óptica, pero con la desventaja de que al estar tan próxima a la fresa la luminosidad se ve reducida. Para resolver este problema, cada vez son más los aparatos que ya utilizan luz LED, y desde hace unos años, una serie de contraángulos ya están funcionando sin la necesidad de energía eléctrica (incorporan un generador que se impulsa por el aire comprimido).


Refrigeración de los Instrumentos Rotatorios

 

La refrigeración mediante aire y agua del instrumental rotatorio es necesaria por dos motivos: el enfriamiento de los dientes, con el fin de que no se sobrecaliente la pulpa, y para que la zona de trabajo sea más visible al mantenerse constantemente despejada y libre de residuos. Para que la refrigeración sea lo más efectiva posible es recomendable que el instrumento utilizado disponga de varias boquillas (los hay de hasta cinco) para obtener el mayor rendimiento, zonas visibles y se disminuyan al máximo los riesgos ante la obstrucción de cualquier boquilla del instrumental.

 


Limpieza y Mantenimiento de los Instrumentos Rotatorios

 

Con el fin de mantener la higiene adecuada de cada instrumento rotatorio, su acoplamiento y motor, estos deben ser esterilizados convenientemente tras la visita de cada uno de los pacientes.


Es conveniente disponer en todo momento de equipos eficaces para limpiar los aparatos rotatorios, con el fin de que estos tengan siempre el mantenimiento más adecuado, que alargue su vida útil. Este proceso, conocido como reprocesamiento dental, debe realizarse periódicamente, siguiendo siempre las recomendaciones que especifica el fabricante, el cuál ofrece además el tipo de aparato de mantenimiento adaptado a la necesidad de cada instrumento rotatorio.


Cada tipo de instrumental requiere de un procedimiento específico para su correcto mantenimiento. Por este motivo, es de suma importancia que, en la elección del instrumental rotatorio para la clínica, se tenga siempre en cuenta que su mantenimiento y su limpieza sean de la mayor facilidad y sencillez posibles. En este sentido, es conveniente tener en cuenta, antes de elegir el instrumento, que, desmontar, separar y montarlo de nuevo sea sencillo y se requiera el mínimo esfuerzo y tiempo.


Con el fin de que los instrumentos estén perfectamente limpios tanto por fuera como por dentro, existen productos específicos para lograr que los interiores también queden bien esterilizados, al igual que poder asegurarse de que que permanecen bien lubricados.



Fresas Dentales
Una completa Guía introductoria a las Fresas Dentales